Debemos buscar evitar que tengan problemas, trastornos de conducta o emocionales: Vero Pérez

Con la finalidad que se brinde atención psicológica y emocional a las niñas, niños y adolescentes, para que no se vean afectados en su desarrollo y bienestar durante el proceso de divorcio sus padres, la diputada Verónica Pérez Herrera presentó la iniciativa de reformas al Código Civil del Estado.

“El divorcio como un evento psicopatógeno que conlleva a sobrecargar la capacidad adaptativa del niño, pudiera provocar un desequilibrio biopsicosocial, por la pérdida física y emocional de una de las figuras parentales dentro del sistema familiar”, informó la también presidenta de la Comisión Legislativa de Salud Pública.

En este sentido, destacó que los problemas más comunes que se presentan en el comportamiento de los hijos de padres separados o divorciados son la agresividad, la desobediencia, dificultades sociales, disminución en el rendimiento académico y baja autoestima.

La legisladora agregó que también surgen trastornos psicosomáticos como dolores de cabeza, malestares estomacales, erupciones en la piel y otros, lo cual tiene incidencia en el área emocional.

“La presencia de estos síntomas en los niños y por un período mantenido, puede llegar a formar parte de los indicadores que conforman el síndrome de depresión infantil presente en la reacción de duelo y que pudiera estar aparejado a la ideación o intento suicida, ya que el suicidio puede acompañar a una situación de estrés mantenido”, resaltó.

Por ello, con las adecuaciones legislativas se busca que la la autoridad jurisdiccional brinde un acompañamiento psicológico gratuito, a más tardar al momento de quedar integrada la Litis y durante todo el juicio, a efecto de que se les proporcione una protección, apoyo y soporte psico-emocional en favor de su pleno desarrollo y bienestar.